Con un emotivo acto en el Auditorio Fernando Gordillo Cervantes, este miércoles, 8 de febrero, la comunidad universitaria de la UNAN-Managua, familiares e invitados especiales celebraron el 90.° aniversario del natalicio del Canciller de la Paz, Miguel d’Escoto Brockmann, digno representante de Nicaragua en el mundo.
En representación del rectorado, el doctor Luis Alfredo Lobato Blanco, vicerrector general, extendió un saludo a los presentes y destacó el rol beligerante del Padre en su gestión diplomática, especialmente como presidente de la ONU, desde donde promovió la reinvención de este organismo e instó a darle seguimiento a temas pertinentes en el contexto, tales como la paz, la igualdad, la justicia, la solidaridad y otros que conllevan al desarrollo de los pueblos y al bien común. Asimismo, el doctor Lobato manifestó que el canciller no tuvo frontera, que su legado sigue vigente y que es digno ejemplo de compromiso social para la juventud.
Durante la conmemoración tuvo lugar un conversatorio en el que la doctora Sofía Clark, politóloga y sobrina del padre Miguel, rememoró acciones que ponen de manifiesto la lucha del padre desde diferentes ámbitos en beneficio de los más vulnerables. Asimismo, expuso cómo sus iniciativas o propuestas estaban enfocadas a la defensa de la soberanía nacional y la libertad de los pueblos. Entre sus aportes también mencionó su incidencia en el cuido medioambiental, tema del cual se pronunció en el Foro de Brecht en New York, en el que hizo un llamado para crear un Tribunal de Justicia Climática y redoblar los esfuerzos para defender a la Madre Tierra.
Además, diplomáticos, amigos del Canciller de la Dignidad, expresaron su cariño y admiración por todo el trabajo realizado en el que fomentó la no violencia y su disposición a ayudar a los más necesitados, debido a su alto grado de sensibilidad y empatía ante situaciones difíciles. Resaltaron que fue un revolucionario que predicó por medio de la acción, que valoró la importancia de la democratización para alcanzar la paz y la seguridad de los pueblos.
Como cierre de la actividad, la doctora Marcelina Castillo, directora de la Casa de la Soberanía Miguel d’Escoto Brockmann, se refirió a la fundación del CESMEB en el 2011, como una muestra del compromiso de la UNAN-Managua con la difusión, análisis y reflexión acerca del pensamiento y legado del Canciller de la Paz. Asimismo, mencionó las acciones que esta instancia impulsa para aportar al desarrollo del pensamiento antiimperialista, emancipador y soberano.
El Padre Miguel d’Escoto Brockmann nació el 5 de febrero de 1933, fue un diplomático, político, sacerdote y dirigente comunitario que aportó históricamente a las relaciones internacionales entre su país y el resto del mundo. Creó la Fundación Nicaragüense pro Desarrollo Comunitario Integral (FUNDECI), con la finalidad de ayudar en la reconstrucción de Managua y apoyar a las familias damnificadas por el terremoto de 1972.
Como ministro de Relaciones Exteriores de Nicaragua presentó ante la Corte Internacional de Justicia una reclamación contra los Estados Unidos de América por apoyar actividades militares y paramilitares contra el país, con un resultado favorable para la nación. Por su trayectoria recibió numerosos reconocimientos. Falleció el 8 de junio del 2017, a la edad de 85 años.
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