Este viernes, 28 de octubre, la bachiller Joseling de Jesús Baltodano Flores, originaria de Santa Teresa y estudiante de la UNAN-Managua, recibió el Premio Regional a la Excelencia Académica Rubén Darío 2022, en su XVII edición. Este galardón es otorgado por el Consejo Superior Universitario Centroamericano (CSUCA) a estudiantes destacados de sus 24 universidades miembros, mediante el Consejo Regional de Vida Estudiantil (CONREVE).
Esta edición, que se realizó en modalidad virtual y presencial, fue organizada por la Universidad de Panamá, anfitriona del evento, y el Consejo Nacional de Vida Estudiantil de Panamá (CONAVE). La ceremonia fue presidida por el presidente y secretario general del CSUCA doctores Francisco González Alvarado y Carlos Alvarado Cerezo, respectivamente, quienes enfatizaron en que este premio es muy significativo para los estudiantes de las universidades públicas de la región, a quienes se les reconoce una actitud de compromiso con su proceso formativo, que representa el esfuerzo colectivo e institucional.
Asimismo, hicieron énfasis en que la educación es fundamental para cambiar las realidades sociales, por lo que es necesario trabajar de manera articulada y cooperativa para avanzar hacia el desarrollo sostenible y solidario. «Las naciones que no invierten en educación, ciencia y tecnología condenan a la mayoría a la marginación social y cultural», aseguró el doctor Alvarado.
Por su parte, la UNAN-Managua reconoció el esfuerzo, dedicación y empeño de Baltodano, estudiante de Inglés en la FAREM-Carazo. Para ello, la Facultad organizó un acto especial presidido por las autoridades universitarias lideradas por la máster Ramona Rodríguez Pérez. En esta actividad se le entregaron diversos premios, entre ellos, una computadora portátil y se le otorgó una beca para cursar sus estudios de maestría en cualquiera de las Facultades de la institución.
La rectora felicitó a la joven, orgullo universitario y representante de esta casa de estudios en la región. Sostuvo que los estudiantes con excelencia académica también se involucran en distintas actividades culturales, de investigación, innovación y extensión, especialmente las concernientes a la interacción con la comunidad.
De igual manera, el vicerrector de Asuntos Estudiantiles, Bismarck Santana Tijerino aseguró que este Premio, además del esfuerzo individual y familiar, también es el resultado del trabajo docente y de las acciones declaradas en la Misión, Visión y Principios Institucionales, las cuales están enfocadas a la formación integral de los estudiantes en correspondencia con el Plan Nacional contra la Pobreza y para el Desarrollo Humano y la Agenda 2030.
Al respecto, el decano de la FAREM-Carazo doctor Raúl Arévalo manifestó que el reconocimiento lo recibe Baltodano, su familia, su comunidad y la Universidad, la que se compromete a formar jóvenes con grandes competencias científico-técnicas y valores humanísticos. Asimismo, mencionó la transformación curricular como una de las tareas enfocadas a fortalecer estas habilidades como parte de la mejora continua.
Baltodano, quien estuvo acompañada de sus familiares y amigos, dio gracias a todos los que aportaron de manera directa e indirecta para que lograra culminar sus estudios superiores con excelente rendimiento, que la hizo merecedora del Premio Regional a la Excelencia Académica Rubén Darío. «Me siento afortunada por esta condecoración. Todos los esfuerzos tienen una recompensa. Agradezco a Dios que ha sido el diseñador y autor de todas las cosas que he recibido en mi vida». Agregó que se debe buscar la calidad en todo lo que se hace, principalmente, en los estudios porque eso se reflejará en la vida profesional.
El secretario adjunto de asuntos estudiantiles del CSUCA máster Miguel Gutiérrez, además de leer la reseña histórica del Premio y felicitar a todos los homenajeados, felicitó a la UNAN-Managua por el reconocimiento que preparó a lo interno para Baltodano y sugirió a las demás universidades a reconocer este logro de sus estudiantes con un acto especial.
El Premio Regional a la Excelencia Académica Rubén Darío se creó como un reconocimiento a aquellos estudiantes distinguidos académicamente y que sobresalen en el desarrollo del conocimiento científico, tecnológico y humanista de las diversas ramas del saber. La entrega del galardón quedó establecida en el Acuerdo Noveno de la XIII Sesión Ordinaria del Consejo Regional de Vida Estudiantil, celebrada en Panamá en mayo del año 2005. La edición XVIII se llevará a cabo en Costa Rica.
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