Con una visión renovada, acorde a los desafíos sociales y jurídicos de América Latina y el Caribe, fue lanzada este jueves 19 de octubre la Maestría en Administración de Justicia de la Escuela de Sociología de la Universidad Nacional (UNA).

Yolanda Pérez Carrillo es la coordinadora de la maestría y es la gestora principal que supo inspirar e involucrar a profesionales en la rama del Derecho y la Sociología para encauzar el objetivo común de hacer este relanzamiento, que cuenta con tres énfasis distintos: penal, civil y relaciones familiares.

“En el rediseño de esta maestría se contemplan las principales tendencias nacionales, regionales y mundiales del desarrollo en la acreditación de la justicia con un enfoque social. El objetivo central es formar a profesionales integrales en la aplicación del derecho sociojurídico, orientado a nuevas discusiones sobre las problemáticas que está viviendo la región latinoamericana y del Caribe”, explicó Pérez.

Corría el año 1995 y este programa iniciaba como un curso de posgrado. Fue 12 años después que se consolidó como una Maestría con sus tres énfasis y una proyección de análisis y estudio hacia la región centroamericana.

María Ester Brenes, jueza en Familia del Poder Judicial, fue parte de la quinta generación de la Maestría y estuvo presente en la actividad de relanzamiento, que se llevó a cabo en el auditorio de la Facultad de Ciencias Sociales. “La maestría era una oferta única en Centroamérica y con el liderazgo y la visión de la UNA representaba una oportunidad no solo de especializarnos sino también de ampliar la discusión en un contexto sociopolítico urgido de fortalecimiento democrático”, relató.

Con el pasar de los años, el Programa tuvo algunas modificaciones, hasta que, en el 2020, Yolanda Pérez asume la coordinación y la titánica tarea de reformularlo. El advenimiento de la pandemia supuso un enorme obstáculo, que se logró sobrellevar con mística y voluntad. Pérez Carrillo comenzó a tocar puertas, a solicitar colaboración, muchos levantaron la mano y los aportes fueron construyendo una propuesta ambiciosa.

Había grupos de trabajo integrados por el cuerpo docente de la Maestría, exalumnos destacados tanto nacionales como extranjeros y en reuniones virtuales nocturnas y de fines de

semana, diseñaron la malla curricular que hoy se compone de 45 cursos entre las tres especializaciones.

“Se han desarrollado 13 promociones de la maestría y este es un logro extraordinario. El proceso de rediseño nos llevó a muchos espacios de discusión y reflexión que ha dado como resultado una modalidad revisada y ajustada a los desafíos de los entornos sociojurídicos. Para el Escuela de Sociología, este Programa forma parte de nuestros ejes de acción prioritaria”, manifestó por su parte Yensi Vargas, directora de la Escuela de Sociología.

Retos apremiantes

La maestría destaca por tener una modalidad virtual y por expandir su rango de estudio a la región latinoamericana. Estos aspectos, junto con el hecho de abordar nuevos paradigmas en los procesos de aprendizaje para hacerlos más accesibles, la posibilidad de que una persona estudiante pueda transitar entre los distintos énfasis y que existiera una actualización de los contenidos que contribuyan a que exista una visión más amplia del ejercicio de la justicia, fueron las prioridades que señaló el rector Francisco González.

El Rector subrayó los desafíos sociopolíticos, donde la administración de la justicia es determinante. “La corrupción, las desigualdades sociales y económicas, la pobreza y la falta de acceso a una justicia eficaz son problemas comunes de toda la región que debemos enfrentar, por eso, esta maestría se convierte en un faro de conocimiento y ética destinado a formar profesionales con una visión equitativa”, manifestó González Alvarado.

Para el decano a.í. de la Facultad de Ciencias Sociales, Guillermo Acuña, el anuncio del relanzamiento se produce en un contexto particular donde existen situaciones sanitarias, económicas y ambientales que viven una época de transición. “La maestría se sustenta en aspectos de sostenibilidad, ética, género y desarrollo humano. El tránsito coyuntural que atravesamos nos coloca en el plano de las reflexiones que nos permiten aportar soluciones a los temas desde novedosas dinámicas académicas”.

Durante la actividad se hicieron reconocimientos públicos a profesionales y docentes que colaboraron con todo el proceso de reformulación del Programa. Con la participación de estudiantes de la Escuela de Música en la amenización del evento y con un acto simbólico que incluyó encender las velas de un queque, la maestría en Administración de Justicia fue oficialmente relanzada.

La información general sobre la maestría, descripción, objetivos y requisitos puede revisarse desde la página https://www.carreras.una.ac.cr/maestria-en-administracion-de-justicia/.