Un grupo conformado por 35 personas que actualmente ocupan cargos de dirección en unidades académicas, de investigación y programas de posgrado, iniciaron este mes de mayo, el programa de formación Kábata, de la Vicerrectoría de Docencia.  “Kábata”, palabra en bribri que significa “montaña”, es un espacio de formación de habilidades y socialización de experiencias para personas que recientemente han asumido puestos de autoridad dentro de la Universidad.

Para el Vicerrector de Docencia, el Dr. Felipe Alpízar Rodríguez la implementación de Kábata representa principalmente un espacio de oportunidad para crear comunidad entre el personal directivo. “Vemos Kábata como la respuesta institucional a la necesidad de un acompañamiento real y sólido, de una relación más cercana, fluida y empática entre las autoridades que lideramos y gestionamos los procesos en las instancias universitarias. Liderar es como subir una montaña, por eso el nombre. No es tarea sencilla, pero se vuelve más fácil cuando se comparte en equipo y nos apoyamos entre pares”, menciona el Vicerrector.

En esta primera edición de Kábata, las personas participantes abordarán temas como liderazgo de equipos, comunicación organizacional, responsabilidades académicas y administrativas de los puestos de dirección, resolución alternativa de conflictos, normativa universitaria, planificación estratégica y promoción de ambientes laborales saludables, entre otros.

La Dra. Claudia Palma es la actual directora de la Escuela de Antropología y participante en el curso. Ella considera que este proceso de acompañamiento tiene que ver principalmente con la creación de habilidades blandas, necesarias para el desempeño de su función directiva. “En este papel (de autoridad) uno no nace. Así como no aprendemos directamente a ser docentes, pasar de la docencia a tratar de liderar un equipo, crear una línea de trabajo específica, crear condiciones para que las personas de la unidad estén bien, propiciar que todas las actividades salgan a tiempo, pero además que sea un espacio crítico en términos académicos, es una tarea que no la aprendemos sino haciéndola” reflexionó Palma al inicio del programa. 

Por su parte, para la directora de la Red Institucional de Formación y Evaluación Docente (RIFED) y coordinadora del programa, Dra. Tatiana Aguiar Montealegre la propuesta de Kábata es un primer intento por construir espacios de intercambio, que son limitados en la institución. “El proceso de diagnóstico que nos permitió construir la idea de Kábata, también nos ayudó a identificar la falta de estas oportunidades de socialización que son fundamentales para el crecimiento individual y colectivo. Más que un espacio para teorizar, se trata de sesiones para comentar experiencias, buscar soluciones colectivas y, desde la consciencia de la propia función en el entramado universitario, contribuir al cambio social” expresó la Dra. Aguiar.

La primera edición del curso tomará cinco semanas y está organizada e impartida por la RIFED, en coordinación con otras instancias universitarias que aportan desde sus respectiva temas de especialidad. Desde una perspectiva formal, Kábata responde a la actualización de un acuerdo del Consejo Universitario de 2003 que solicitaba la creación de un Curso Superior en Gestión y Liderazo en la Administración Universitaria.

Las personas participantes en esta primera generación fueron invitadas a partir de la identificación de los cambios de autoridades más recientes.