El doctor en ingeniería de materiales y de procesos químicos y metalúrgicos, Oliver Everett Espino, participó esta semana en un coloquio sobre producción de metano a partir del excedente de la energía solar y eólica, organizado por la Escuela de Física de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH).
Durante su intervención, el expositor señaló que, aunque dichas energías alternativas o de fuente renovable no producen gases de emisión que aumenten el efecto invernadero, ambas tienen la desventaja de que son intermitentes y esa intermitencia provoca un exceso y no existe una forma eficiente de almacenarlo, lo que constituye un gran reto.
Al respecto resaltó la posibilidad de hacerlo en forma de gas natural sintético, específicamente metano, lo que además contribuiría a reducir la contaminación ambiental y el efecto invernadero provocado por el dióxido de carbono.
“El metano es básicamente el compuesto principal del gas natural que se encuentra en los yacimientos de petróleo y por eso a este metano, que es producido en forma de biocombustible, le llamamos gas sintético natural”, explicó.
“Producir metano utilizando el exceso de energía tiene la desventaja que al compararlo con el gas natural que viene de las fuentes fósiles es entre dos y siete veces más caro, pero al mismo tiempo presenta un reto para la ciencia intentar mejorar en todo lo posible el proceso de producción para bajar el costo”, continuó.
Everett Espino detalló que la tecnología utilizada para almacenar ese exceso de energía se llama Power To Gas o energía para gas y el método consiste en utilizar el exceso de energía de la fuente eólica o de la fuente solar para producir electrólisis del agua y separar el hidrógeno, para luego, junto con el dióxido de carbono, someterse a un reactor de metanación para producir metano.
“Este metano posteriormente puede ser integrado ya sea para hacer combustible de automóvil o utilizarse sin ningún problema en las líneas o redes de gas ya existentes en algunos países para calentamiento, por ejemplo, de estufas”, dijo.
Un análisis de sensibilidad realizado por diferentes autores muestra que modificando variables como el capex, la eficiencia del proceso y los costos de operación, entre otros, el precio se puede reducir.
Comentarios