En el marco de la conmemoración del 47 aniversario del Consejo Nacional de Rectores (CONARE), se llevó a cabo este martes el Traspaso Anual de su Presidencia, que fue asumida por Rodrigo Arias Camacho, rector de la Universidad Estatal a Distancia (UNED), con el compromiso de avanzar en el fortalecimiento de la educación superior, analizando las condiciones actuales para responder a las demandas de la sociedad costarricense.

El actual presidente del CONARE manifestó que el año 2022 “será un año de grandes desafíos y de muchas esperanzas para el Consejo Nacional de Rectores para cada una de las universidades públicas. Es un año caracterizado por un cambio de gobierno, un cambio de autoridades en el sistema educativo y autoridades políticas en general, esperamos mantener un diálogo permanente con todas las autoridades las actuales y las nuevas, y sentar claramente el papel que corresponde cumplir a las universidades en la sociedad costarricense moderna, tal como lo hemos venido planteando, pero que sea posicionado y reconocido en este nuevo contexto del año 2022”.

Con respecto a los ejes estratégicos del trabajo del CONARE, en su función coordinadora y articuladora del sistema universitario estatal, Arias Camacho resaltó la revisión del Plan Nacional de Educación Superior 21-25, lo cual fue planteado en el año 2020, cuando fue aprobado “para que se ajuste y responda a las condiciones de la Costa Rica pos pandemia o por lo menos con una etapa avanzada de la pandemia para que sea atinente al nuevo contexto en el que nos desenvolvemos actualmente”.

Asimismo, destacó el compromiso público adquirido por los rectores con el país, con la elaboración de una propuesta de un marco de empleo universitario homologado, en el cual se ha venido trabajando intensamente desde el CONARE, durante este año 2021. “El compromiso que tenemos es que la propuesta básica esté preparada en el año 2022 y a partir de ahí avanzar con la implementación, los planes de transición y las acciones que deberán seguirse. Esto es un compromiso que asumimos los rectores y que fue avalado por todos los consejos universitarios, por federaciones estudiantiles e inclusive por algunos sindicatos. Este será un instrumento valioso para la sostenibilidad de las universidades, pero también para responder a las expectativas de la sociedad costarricense”, agregó.

El presidente del Consejo indicó que se seguirá en defensa de la Autonomía Universitaria, de los objetivos y de las funciones que la Constitución Política asigna a las universidades públicas en nuestro país, los cuales hemos venido defendiendo constantemente durante estos años anteriores.

Por su parte, el presidente saliente del CONARE, Francisco González Alvarado, rector de la Universidad Nacional (UNA), señaló entre los retos y panorama asumido este año y que, desde el CONARE y las universidades públicas, “hemos argumentado que la aplicación de la regla fiscal a las universidades en particular y a las instituciones públicas en general, dificulta el uso de los recursos girados, por lo cual se convierte en uno de los principales retos para asegurar la inversión en todas las áreas sustantivas de las universidades públicas. Esta limitante obstaculiza la posibilidad de atender más estudiantes u otorgar más becas. El actual incremento en el gasto aplica a la ejecución del año anterior, que se ha visto afectado por la pandemia, principalmente por la operación remota de las instituciones, lo cual evidencia la inflexibilidad de la norma y la necesidad de su revisión”.

Resaltó el papel de las universidades estatales en la atención de la pandemia y en las acciones adoptadas para el acceso y la permanencia del estudiantado. “La educación pública ha sido un pilar fundamental en la consolidación de la democracia costarricense, y por ello debemos defender que se mantenga como un bien público social y un derecho humano, como un bien común de todas y todos los costarricenses. Ello implica pensarla como un espacio científico-cultural amplio, en clave humanista, desde donde se promueven acciones que contribuyen al mejoramiento del bienestar y la calidad de vida de todas y todos los ciudadanos”, dijo.

La presidencia del Consejo Nacional de Rectores se asume por un período de un año, en conformidad con la normativa se rota de acuerdo con el orden cronológico de creación de cada universidad pública que constituye el CONARE.