Un 56.1% de salvadoreños tiene poca o nada de confianza en las cifras de contagios que difunde el Ministerio de Salud del Gobierno de El Salvador, también un 60% desconfía sobre el número oficial de fallecidos, víctimas del COVID-19; aseguran los resultados de una investigación realizada por el Círculo de Estudios Sociológicos de la Escuela de Ciencias Sociales de la Universidad de El Salvador,  dados a conocer el miércoles 5 de agosto de 2020.

Por otro lado, un 48% de encuestados aseguran desconfiar de la utilización de los recursos financieros del pueblo salvadoreño por los funcionarios del Gobierno.

Sin embargo, un 66.7% de las personas que participaron en este ejercicio de opinión percibieron que la implementación de la cuarentena de marzo a junio de 2020 es “buena o excelente” por lo que apoyarían la instauración de un nuevo confinamiento.

Según una de las colaboradoras de este proyecto, Maya Dimas, hay un resultado paradójico por lo que el equipo concluyó que “hay una tendencia a desconfiar de las instituciones, pero los salvadoreños consideran que la figura presidencial no es una de ellas”.

Asimismo, los resultados reflejan que se ha creado en el imaginario nacional que el salvadoreño es irresponsable y “vago” y en un 47% opinan que tienen la culpa del incremento de casos.

“El presidente se ha encargado de culpabilizar a otras entidades, incluida la ciudadanía a quienes ha denominado como ‘codiciosa’ o ‘vanidosa’, según lo publicó en un tweet”, indicó Dimas.

Esta construcción social ha permitido el establecimiento de medidas de “mano dura” para limitar y asumir un rol autoritarista, de la Policía Nacional Civil y las Fuerzas Armadas.

En cuanto a los afectados por el COVID-19, la encuesta proyecta que un 71% de personas cuestionadas conocían a gente que había presentado síntomas relacionados con la enfermedad, de ellos: 43% señaló que son conocidos, 33% amistades y un 24% familiares.

Respecto a cercanos fallecidos por la pandemia, un 61% conocía algún caso de éstos: 67% dijo se trató de un conocido, 25% amigos y un 8% familiares.

La población tiene mucha desconfianza al sistema de salud, según concluye la investigación, por eso, interpretó Marcela Acosta, del equipo investigador, quien añadió que un 31% manifestó síntomas familiarizados con el COVID-19 de ellos: un 78% optó por automedicarse o realizar etno práticas o indagaron sobre protocolos en línea.

Un 5% buscó atención médica en centros de salud públicos, y un 2% lo hizo un el sistema privado.

Finalmente, el  director de la Escuela de Ciencias Sociales y coordinador de la investigación, PhD. Ricardo Argueta, aseguró que la poca fiabilidad en las cifras gubernamentales del Gobierno, esa incertidumbre sobre los datos reales, que parecen más altos en la realidad, ha hecho que la población apoye la cuarentena obligatoria.

Además, Argueta opinó que aún la población tiene confianza en la utilización de recursos financieros del Estado; sin embargo, ya empezó a verse un descenso en esto. En la medida que se vayan destapando más casos de supuesta malversación de fondo, en esa medida bajará la fe del pueblo salvadoreño, afirmó.

837 personas fue la muestra de esta investigación cuentitativa que tuvo a encuestados de todos los departamentos del país. El  Lic. Huber Romero, coordinador de la presentación, agregó que en su mayoría se difundieron las preguntas a través de redes sociales de mensajería y sus participantes tienen entre 18 y 60 años de edad.

Apoyaron además el PhD. Argueta, el Lic. Romero, los bachilleres  Marcela Acosta,  Jesús Mena y Jorge Arévalo;  así como  estudiantes de cuarto año de la carrera en Sociología.

El decano de la Facultad de Ciencias y Humanidades, Msc. Wuilman Herrera, recalcó la importancia de este tipo de investigaciones que deben ir “hiladas” a las otras dos funciones de la UES: proyección social y docencia, de modo que juntas impulsen el desarrollo de la Nación.

Herrera informó que también se han realizado investigaciones sobre el impacto psicológico y sobre las violaciones a derechos humanos durante el contexto de la pandemia de COVID-19.

El decano informó que, gracias a las gestiones del rector de la UES, MSc. Roger Arias, hay disponibles fondos para investigaciones científicas con las que se podrá financiar el Circulo de Estudios Sociológicos en 2021.

En ese sentido, el  PhD. Argueta.  expresó que la intención de este esfuerzo inicial tiene el objetivo de convertirse en un Centro de Investigaciones de las Ciencias Sociales que amplíe el estudio, además de la Sociología, de los rubros de: Historia, Antropología y la praxis del Trabajo Social.