Futura ingeniera de la UTP estudia la calidad del agua para consumo humano en Caballero, Pajonal y San Juan de Dios

Una estudiante de pregrado de la Universidad Tecnológica de Panamá (UTP), realizó un estudio científico que analizó la calidad de las aguas subterráneas que se utilizan para el consumo humano en los corregimientos de Caballero, Pajonal y San Juan de Dios, en la provincia de Coclé.

 La futura ingeniera Anmary Domínguez, de la carrera en Ingeniería Geológica de la Facultad de Ingeniería Civil de la UTP, encabezó el proyecto de investigación titulado “Estudio hidrogeoquímico de la calidad de las aguas subterráneas para consumo humano en San Juan de Dios, Pajonal y Caballero de Coclé”. Este se desarrolló bajo la tutela de la Dra. Ana González Valoys, investigadora de esta casa de estudios superiores, asociada al Centro de Estudios Multidisciplinarios en Ciencias, Ingeniería y Tecnología (CEMCIT AIP), y miembro del Sistema Nacional de Investigación (SNI) de Panamá.

 “El objetivo de este estudio fue evaluar la calidad de las aguas subterráneas empleadas para el consumo humano de la población de estos tres corregimientos, ubicados en el Complejo Volcánico El Valle, a través de análisis fisicoquímicos y biológicos de las aguas y los suelos circundantes. De esta forma podremos establecer una línea base de los elementos químicos presentes y su relación con la geología local”, comparte la joven investigadora.

 Actualmente, los corregimientos de Caballero y San Juan de Dios, pertenecientes al distrito de Antón, y el corregimiento de Pajonal, ubicado en el distrito de Penonomé, utilizan sistemas de acueductos rurales que se abastecen de aguas subterráneas para el suministro de agua potable para el consumo de sus habitantes. Estas infraestructuras son administradas, operadas y mantenidas por las Juntas Administradoras de Acueductos Rurales (JAAR) de cada comunidad.

 “Si bien las aguas subterráneas tienden a ser dulces y aptas para consumo humano, es necesario evaluar su calidad, ya que pueden contener ciertos elementos químicos presentes de forma natural por medio de la disolución de las sales de las rocas que conforman los acuíferos”, explica Domínguez.

 La investigación inició con la revisión de la literatura existente de investigaciones del área y el diseño de la campaña de muestreo en diferentes puntos por cada corregimiento. Una vez culminada esta etapa y gestionado los permisos pertinentes, la joven investigadora y su tutora iniciaron la colecta de muestras de aguas subterráneas que se emplean para el consumo humano y el suelo circundante a ellas, para la evaluación de parámetros fisicoquímicos. Algunos de los parámetros evaluados fueron el pH, la conductividad eléctrica, temperatura, presencia de elementos, entre otros.

 “Una vez recolectadas las muestras, tanto de aguas subterráneas como suelo, se procedió a su pretratamiento y posterior envío al laboratorio para su análisis. Parte de las muestras fueron enviadas a un laboratorio especializado en Canadá, mientras que otras fueron analizadas en la UTP. Los resultados de estos análisis luego fueron procesados para obtener la clasificación del tipo de aguas, la evaluación de la calidad química y biológica, y su relación con la geología del sitio”, describe la futura ingeniera. 

Los resultados de este proyecto de investigación, los cuales indican que la calidad química del agua es excelente, fueron presentados a las autoridades locales, representantes de las JAAR y miembros de las comunidades pertenecientes a los tres corregimientos en la Casa Comunal del corregimiento de San Juan de Dios. Asimismo, se hizo entrega de un informe de resultados a las autoridades del corregimiento y del distrito. 

Para la Dra. González, asesora de la joven investigadora, este proyecto permite validar un modelo para la evaluación de la calidad de las aguas subterráneas, donde se incluya la valoración del parámetro geológico, su influencia en la calidad y su descripción geoquímica. “Este estudio científico surge en respuesta a las inquietudes de los moradores de estos corregimientos de conocer la calidad de las aguas de sus acueductos rurales, por lo cual se acercaron a la UTP a solicitarlo, y nosotros, en nuestra labor de extensión e investigación, hemos acudido; realizando desde la búsqueda de fondos, la labor de investigación de campo, laboratorio y de gabinete con un equipo multidisciplinario de especialistas hasta poder compartir los resultados con las Juntas de Acueductos, las comunidades, autoridades y la comunidad científica”, destaca la especialista en geoquímica aplicada.

Esta investigación científica contó con el financiamiento de la Secretaría Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación (SENACYT), mediante la Convocatoria Pública de Nuevos Investigadores e Innovadores 2023, y se realizó bajo la gestión administrativa del CEMCIT AIP.