Una vez más la UPNFM rinde tributo al máximo prócer de Centroamérica, José Francisco Morazán Quezada, por su natalicio un día como hoy pero hace 228 años; efeméride que fortalece y exalta el espíritu morazanista de esta casa de estudios.
Este año, la celebración se llevó a cabo de forma distinta por la pandemia, pero siempre con la alegría y fervor que caracteriza a la comunidad académica de la máxima casa formadora de docentes del país.
Bajo ese contexto, el Rector Hermes Alduvín Díaz recordó tres ideales del prócer “todos los ciudadanos debemos ser libres, gozar de libertades fundamentales como la libre expresión y la libertad de conciencia y tenemos derecho a la educación gratuita”.
“Este 03 de octubre reflexionemos y comprometámonos con esta noble patria Honduras que nos da dado todo; por la que debemos trabajar sin descanso pese a la pandemia y demostrar que teneos la capacidad de cambiar positivamente la adversidad”, dijo.
Hizo un llamado a imitar el ejemplo del prócer y recordarlo por su carácter, modestia, sencillez, honradez pero sobre todo por la liberación de Centroamérica por la que tanto luchó.
Entre tanto, el Vicerrector Administrativo Darío Cruz recitó los versos del poeta Rafal Paz Paredes en un escrito titulado “La UPNFM, ayer morazánica; hoy morazánica; siempre morazánica”, y recordó los maestros fundadores de esta Alma Máter quienes desde sus orígenes creyeron en ese legado el paladín.
Cruz, enfatizó que en la UPNFM se forman profesionales capaces de sembrar la idea generosa de la educación que es un patrimonio de todos, con convicciones democráticas, haciendo participe al pueblo de su beneficios.
Para la UPNFM es un honor ostentar el nombre del referente centroamericano que luchó por las libertades públicas, la libertad de cátedra, la separación de la iglesia y el Estado, la libertad de conciencia, el desarrollo industrial y económico, la h9onestidad y probidad en el manejo de los fondos públicos, la libertad de prensa, entre otros.
El evento, donde estuvo presente el equipo de Rectoría en representación de la comunidad académica y administrativa concluyó con la colocación de una ofrenda floral en la Plaza de las Banderas del Campus Central, donde se ubica la estatua del héroe y la entonación del Himno a Morazán.
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