Seis meses después de reportarse el primer caso de Coronavirus en Costa Rica, investigadores de la Universidad Nacional (UNA), coinciden que la Covid-19 desnudó las inequidades económicas y sociales del país y en muchos casos excedió las capacidades de los sistemas, ya que hubo procesos que no se agilizaron y decisiones que debieron acatarse de forma rápida y expedita.

Dichas declaraciones fueron externadas esta mañana en conferencia de prensa por Juan José Romero, coordinador de la Maestría en Epidemiología de la UNA y Olman Segura Bonilla, director del Cinpe-UNA, como parte de un balance general realizado del impacto de la pandemia a seis meses de su llegada a Costa Rica.

Romero manifestó que la reacción del país en las fases de preparación y contención de la epidemia resultaron exitosas; no tanto así en la mitigación. Las medidas draconianas de la primera parte de la pandemia fueron fundamentales para preparar la respuesta del sistema de salud, especialmente la Caja Costarricense del Seguro Social (CCSS).

Agregó que las medidas restrictivas no tuvieron igual efecto en todos los momentos, ni en todos los lugares: ¿dificultades de estrategia epidémica y de comunicación efectiva?. “Un evento que surgió como una emergencia sanitaria se volvió, de pronto, una emergencia económica y social de dimensiones y efectos insospechados'', comentó el especialista.

Como parte de las lecciones aprendidas, Romero indicó que algunos actores sociales llegaron a poner lo económico y lo sanitario en aceras contrapuestas, como si de una dicotomía se tratase, cuando más bien son dos caras de la misma moneda, aspectos necesariamente complementarios.

Acciones claras

Entre tanto, Olman Segura, exrector de la UNA, expresó que las inequidades económicas y sociales que destapó la pandemia deben atenderse de manera urgente la única, por ejemplo: generando empleo privado en el sector productivo nacional, cooperativas, asociaciones solidaristas y las pymes, entre otras, para de esa forma producir empleo con un salario digno y a la vez generar los ingresos necesarios para el aparato estatal.

Segura enfatizó que se requiere que el gobierno tome acciones claras, contundentes firmes, en aras de presentar un verdadero y efectivo plan de salvamento de las empresas y del empleo para que sea sostenible con los recursos necesarios. “Se requiere de gran liderazgo para concertar con los diferentes grupos sociales'', aseveró el exministro de Trabajo.

Subrayó que se debe evitar a toda costa que un convenio con el Fondo Monetario Internacional (FMI) lleve al país a una explosión social con protestas y marchas en las calles, pues la sociedad está en punto de ebullición. “Espero que se apruebe el préstamo con el FMI con las condiciones dignas para un país como el nuestro, ya que no existe una segunda alternativa y sería catastrófico la no aprobación”, resaltó Segura.