Con la finalidad de abordar temas concernientes a la apicultura en el país, una comisión de la Facultad de Ciencias e Ingeniería de la UNAN-Managua, encabezada por el decano, maestro Marlon Díaz, sostuvo una reunión con representantes de la Comisión Nacional Apícola de Nicaragua (CNAN), en la que se habló sobre la formulación de acciones que permitirán el fortalecimiento y desarrollo de buenas prácticas en este sector.

Durante la reunión el maestro Díaz realizó una presentación sobre el perfil, quehacer y proyección de la Facultad, asimismo, mencionó que la institución tiene carreras como Biología, Ingeniería Ambiental y Gerencia Ambiental y de los Recursos Naturales, las cuales serán claves para fortalecer las capacidades técnicas y productivas de las MIPYMES que se dedican a la producción de este rubro.

El presidente de la comisión, Fabricio Mendoza, dijo que el interés de ellos es tener un acercamiento con la Universidad para que esta pueda compartir conocimientos y experiencias desde la parte ambiental. “Lo que requerimos es la formación de algunos técnicos especialistas que se dedican a la capacitación de productores. Además, consideramos que la academia es un aliado clave para la implementación de nuevas tecnologías; somos un sector que se ha quedado atrás en tecnología y la universidad desde sus avances en este tema puede incidir para que logremos mejorar en la productividad”.

Según Mendoza, la comisión tiene como fin desarrollar un mapa floral que permita la movilización de una zona a otra y que indique el lugar donde buscar floraciones para producir miel. “consideramos que la Universidad por medio de sus carreras ambientales nos puede apoyar en la elaboración, lo cual será un aporte a este sector que va en aumento”, afirmó.

El acuerdo alcanzado en esta reunión fue trabajar en la formulación y ejecución de un convenio que refleje acciones concretas que permitan el desarrollo de las temáticas planteadas por la comisión.

La apicultura tiene como objetivo aprovechar de forma racional y adecuada la miel y otros productos de la colmena (incluyendo la cera, el propóleo, polen y jalea real), para polinizar los cultivos, o para producir abejas para su venta a otros apicultores.