Esta tarde autoridades de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH) y Doris Alejandrina Gutiérrez designada presidencial firmaron un convenio marco de colaboración con el que buscan beneficiar a 45 municipios de Honduras, El Salvador y Guatemala en el marco del Proyecto Trifinio que abarca los tres países que conforman el triángulo norte de Centroamérica.

El Plan Trifinio es un organismo regional que forma parte del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), que busca desarrollar un proceso de gestión del ambiente y del territorio, con el fin de que este se convierta en la posibilidad de mejorar las condiciones de vida de las comunidades fronterizas.

En ese sentido el rector de la Alma Máter Francisco Herrera Alvarado manifestó, “para nosotros es motivo de un gran orgullo que constantemente volteen sus ojos hacia la academia para lograr el apoyo y el soporte que el país necesita y más  satisfactorio aun cuando vemos una y otra vez  que esta universidad da respuestas contundentes, nos sentimos complacidos y satisfechos”.

Por su parte, la designada presidencial, abogada Doris Gutiérrez, comentó que, “cuando se nos asignó esta tarea lo primero que se nos vino a la cabeza fue que necesitamos el apoyo de la academia, nosotros como egresados de esta Alma Máter tenemos una deuda moral y social con nuestros pueblos”.

Asimismo el titular de la Vicerrectoría de Relaciones Internacionales (VRI), Marco Tulio Medina, explicó que la intención planea unir esfuerzos con las universidades de El salvador y Guatemala, para potenciar los resultados de la iniciativa.

“Será una enorme oportunidad para trabajar en conjunto y gestionar ayuda, identificar problemas y servir de puente entre organizaciones y sectores de la sociedad especialmente los más vulnerables”, agregó Medina.

Según los funcionarios en esta área existe una pobreza extrema, además de la pérdida de recursos naturales, entre los grandes retos se identificaron problemáticas migratorias, el crimen organizado, en donde la falta de empleo, la inequidad social y la seguridad alimentaria y nutricional además del deterioro de los recursos naturales, son la norma.

La firma de este convenio es el primer paso para buscar estrategias y mejorar la calidad de vida de los hondureños, salvadoreños y guatemaltecos ya que se desprende una gran coincidencia de intereses.