Certificación Nacional de Finca Segregada para Centro de Práctica de UNA Camoapa
Después de un proceso de inspección de 8 meses por la Comisión Nacional Ganadera de Nicaragua (CONAGAN), como parte del Programa Nacional del Sistema de Segregación Bovina; el Centro de Práctica San Isidro Labrador de la Universidad Nacional Agraria (UNA) en su sede universitaria Camoapa, logró la Certificación Nacional de Finca Segregada con un porcentaje del 94%, lo cual lo ubica en los estándares más alto para el manejo y producción de bovinos.

Las fincas segregadas, se diferencian de otras fincas por su manejó y cumplir con algunas características, como contar con las instalaciones adecuadas, adoptar las mejores condiciones en el manejo higiénico de los animales, llevar registro pecuario, evitar el uso de agroquímicos, hacer un buen manejo de almacenamiento de alimentos y medicina, asegurar la presencia de médicos veterinarios y mantener el hato ganadero libre de enfermedad infectocontagiosa como la brucelosis o tuberculosis.

 

El maestro Luis Hernández Malueños, director de la sede, explicó que, aunque Nicaragua es el principal exportador de carne en Centroamérica, este tipo de finca bien consolidada dará la posibilidad de incursionar en otros mercados internacionales, como la Unión Europea. 

 

El Centro de Prácticas de la UNA, ahora forma parte de las 356 fincas segregadas que existen en Nicaragua. “Hemos logrado la certificación, el reto ahora está en mantenerlo, mejorar y seguir creciendo, ya que las inspecciones se hacen de forma anual y si nos encuentran deficiencia con relación a lo que habían encontrado inicialmente nos quitan la certificación”, explicó el maestro Hernández.

 

Aunque en la inspección que realizó CONAGAN, se estudió el manejo de especies mayores que incluyen los bovinos y los equinos tomando en cuenta el estado de salud del animal, su manejo alimenticio y sanitario; en el centro existen granjas porcinas, avícolas y ovinas.

 

 

ACTIVIDADES DEL CENTRO

 

La entrega de certificación implica que el centro debe cumplir con una serie de actividades habituales que garanticen un buen manejo en la alimentación, la genética y sanidad del animal. “En este centro preparamos la alimentación del ganado para todo el año, tenemos cultivos de pastos y estos lo utilizamos en ensilaje para tener reserva en la época seca, además del suministro de suplementación de urea, semolina y concentrado de ganado lechero, lo cual se mezcla en una sola porción y se sirve a los animales”, así lo manifestó el ingeniero zootecnista Néstor Espinoza Granado, responsable del Centro de Prácticas San Isidro. 

 

Así mismo el docente universitario destacó que parte de la formación que se inculcan en el centro a los estudiantes está el “No maltrato animal”, una norma que los distingue a merecer también la certificación de segregación bovina.