La carrera de Educación Especial profundizó en el tema de las Neurociencias y la Resiliencia

En el marco de las celebraciones del 20 Aniversario de la Carrera de Educación Especial de la Escuela de Ciencias de la Educación (ECE), se llevó a cabo el Conversatorio:  Los estudiantes ante situaciones adversas y el rol docente: Neurociencias y Resiliencia, a cargo de la Dra. Anna Forés Miravalles, pedagoga y escritora española de la Universidad de Barcelona.

La actividad se llevó a cabo hoy y a la cita acudió Evelyn Hernández Sanabria coordinadora de Cátedra de Educación Especial, Jorge Montero Segura y Virginia Navarro Solano de la carrera de Educación Especial y Viviana Berrocal Carvajal encargada de la carrera de Informática Educativa.

Hernández Sanabria señaló que el Conversatorio es un espacio donde: “converge personas estudiantes y docentes; así como nos acompañan personas de las carreras de Enseñanza de los Estudios Sociales y de Informática Educativa. El tema que nos compete es importante porque se valoran las situaciones que enfrentan los estudiantes, ante las adversidades como la Pandemia por COVID 19 y la importancia de nuestro rol docente dentro y fuera de las aulas”.

Montero Segura presentó un video, previo a la charla, el cual mostró  aportes importantes de: las funciones mentales en el aprendizaje, la importancia de a conectividad de las neuronas, el control de impulsos, la importancia de que el estudiante este en un ambiente de ejercicio y el trabajo del estrés situación determinante por la emergencia sanitaria por COVID 19, entre otros.

La expositora Ana Forés Miravalles durante su presentación desarrolló diversos aspectos de la resiliencia vinculada a las situaciones adversas de la persona estudiante y el rol del docente. Al respecto, la especialista mencionó:

  • Neuroeducación y resiliencia tiene muchos puntos en común. Hay un aporte de las emociones desde la neuroeducación, se le da mucha importancia en el aprendizaje en lo que aprendemos y como lo aprendemos desde distintos ámbitos. Así, por ejemplo, la mentalidad de crecimiento es un proceso, un estado que tiene que ver con la madurez infantil. La importancia de las funciones ejecutivas, que son las que ayudan a tomar decisiones a planificar. El estrés es otro elemento en la neuroeducación, así como también el tema del vínculo, desde la óptica de la resiliencia es muy valioso.
  • La metáfora del Cisne Negro permite demostrar que aquello que se cree improbable que pase, puede pasar.
  • Estamos en un mundo ambiguo que cambia rápidamente. Con la pandemia nos hemos sentido muy frágil, con escenas de duelo. Al cerebro no le gusta la incertidumbre. La vida tiene sus movimientos y hay cosas que no son lineales ante un mundo incierto.
    • Dos herramientas claves que se debe trabajar en las aulas es el pensamiento crítico y la creatividad e imaginación para construir el futuro.
    • El miedo debe convertirse en confianza y por ello se debe crear estrategias en el aula, para concebir la confianza con los estudiantes.
    • La resiliencia es el realismo de la esperanza. Muchos se dicen a sí mismo: “Yo no quiero vivir esta pandemia, pero nos toca vivirlo”. La segunda parte implica proyectar futuro que es esperanza, generar oportunidades. ¿Preguntarse qué se puede hacer ante la adversidad? Centrar la mirada en cómo hacemos las cosas y lo que podemos hacer, conlleva a un panorama esperanzador.
    • Nosotros debemos confiar en los niños y niñas y por ello debemos dar mensajes de confianza, para reforzar la autoestima y oportunidad para ir creciendo.
    • Con la pandemia los docentes que se han reinventando, han personalizado la educación ya que cada docente conoce a sus alumnos de manera puntual. Hay un vínculo entre profesores y estudiantes, con la familia y con lo que acontece en el a escuela o lo que pasa en la universidad, con lo que pasa fuera de las paredes del aula.
    • No se debe empobrecer la educación, se debe invertir en educación para minimizar las brechas.
    • Cuidar al cuidador, es vital. El docente se debe cuidar y compartir con otros docentes para hablar de realidades, y así crear espacios que provoquen la conversación de temas. Pero igualmente la institución llamase universidad o escuela debe cuidar a sus docentes.
    • En resiliencia se habla de la U de la Aventura, que nos indica que, en la vida, nos topamos con aventuras, o adversidad que nos lleva a la travesía del desierto y de la incertidumbre. Esto sugiere un proceso de adaptación. Si entiendo que la vida no es lineal, que puede haber situaciones de subidas y bajadas, entonces tomo los recursos de resiliencia que poseo, para salir avante.
    • La neuroeducación nos habla de la flexibilidad cognitiva y el trabajo que se debe hacer en el aula. ¿ Cuáles han sido las lecciones aprendidas durante la pandemia y con que me quedo? Es una reflexión que el docente debe interiorizar.
    • La universidad debe formar no solo al profesional, sino a personas sensibles, seres humanos que contribuyan a que nuestra mirada pedagógica, se oriente al mejoramiento de la calidad de la educación y nuestro rol como docente.

    Durante la actividad el público junto con Jorge Montero Segura construyó una nube de palabras claves como: aprendizaje, apoyo, persona, conocimiento emociones motivación, comunicación, aprendizaje apoyo neuroeducación entre otras; que permitió enriquecer el espacio. Asimismo, Viviana Berrocal retroalimento el espacio mediantes del público y Virginia Navarro Solano realizó el cierre del evento.

     Par ver la acividad, puede hacer clic aquí.