Con el objetivo de analizar sus realidades, optimizar sus procesos y encontrar mejores rutas para continuar promoviendo la excelencia académica, la comisión de Gestión de Calidad e Innovación en Educación Superior (GECIES), de la cual forma parte el Instituto de Gestión de la Calidad (IGESCA) de la UNED, así como sus homólogas de otras universidades estatales, se llevó a cabo la conferencia “Educación superior y formación en liderazgo educativo, tensiones actuales y escenarios poscovid”.

Para abordar este tema, los organizadores invitaron a Miguel Ángel Díaz Delgado, del Instituto de Investigaciones sobre la Universidad y la Educación (IISUE) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM).

“Me siento muy honrado de que me hayan invitado a dar esta conferencia, en este espacio conoceremos las tensiones actuales de la formación de directivos en la educación superior y los planteamientos, desafíos y escenarios a partir de la emergencia generada por el COVID-19”, manifestó Díaz Delgado.

Al inicio de la conferencia, el experto mexicano explicó los términos de Educación superior, Educación elemental, Directivos y Formación de directivos.

En palabras de Díaz Delgado, la educación superior está representada por instituciones formales de nivel secundario y terciario que ofrecen acceso al grado académico e instruyen para acreditar el acceso a una profesión; respecto a la educación elemental, este alude al nivel educativo primario formal. En cuanto a los directivos, se refiere a profesionales de instituciones educativas que ostentan una función en la coordinación, gerencia y administración institucional de la educación superior, mientras que la formación de directivos, alude a los espacios formales de especialización, habilitación e investigación en el cargo de la dirección de organizaciones educativas.

“Cuando nos referimos al liderazgo educativo, estamos diciendo que es un área de investigación y de la práctica enfocada en estudiar las relaciones entre sujetos e instituciones donde se juegan el acceso al poder, la toma de decisiones y la agencia de los sujetos, así como las relaciones entre la voluntad y la acción, sus efectos y las condiciones en que éstas se confeccionan”, acotó Díaz Delgado.

El experto ubicó a cuatro grandes tensiones que existen actualmente entre las formaciones directivas e instituciones de educación superior, entre ellas: Fluctuación disciplinar de la formación directiva; El desarrollo coyuntural de la formación directiva; Formación directiva preservadora del estatus quo versus las propuestas relacionales y Fragmentación entre los niveles primarios y superiores en la formación directiva.

Los desafíos para la educación superior y la formación de directivos en el escenario post-COVID-19 son muchos, indicó Díaz Delgado. Sin embargo, aconsejó que es importante tomar en cuenta los siguientes aspectos: el desarrollo psicoemocional; replantear planes institucionales a mediano plazo; desarrollo de plataformas eficientes para el trabajo a distancia; formación en tecnologías para el aprendizaje y la comunicación; generar espacios de colaboración híbrido-presencial y a distancia; apostar por la formación directiva sostenida y por la investigación; explorar las propuestas relacionales de formación e investigación en liderazgo; generar espacios de formación en flexibles, híbridos y que permitan contacto con los contextos profesionales, e impulsar esquemas organizativos basados en el liderazgo distribuido.

Qué es GECIES

El GECIES fue creado en el 2015 con el compromiso de fomentar una cultura de calidad e innovación en las instituciones de educación superior del país. Uno de los propósitos es promover estrategias y mecanismos de gestión de la calidad, que coadyuven en el cumplimiento de las metas, en el mejoramiento continuo de la gestión y la dinamización de prácticas innovadoras en el quehacer académico. En la actualidad, dicha comisión está integrada por la Universidad de Costa Rica (UCR), la Universidad Nacional (UNA), la Universidad Estatal a Distancia (UNED) y la Universidad Técnica Nacional (UTN).