Micro Empresarios del campo universitario no escaparon al duro golpe que les provocó el Covid-19

Los micros empresarios que trabajan en el Campus Universitario, no han escapado a los negativos efectos que ha causado la pandemia provocada el COVID-19 en sus finanzas.

Los dueños de las pequeñas empresas cerraron en marzo por falta de estudiantes que son sus principales clientes; nueve meses después las puertas aún permanecen bajo llave; y parece que mientras continúe esta pandemia y los estudiantes permanezcan alejados del Campus, las puertas de estos negocios continuarán cerradas.

Estas empresas pertenecen a pequeños comerciantes que mantienen una economía de subsistencia, muchos de ellos son estudiantes que utilizan estos ingresos para pagar las carreras que estudian.

Los negocios que levantaron estos micro empresarios con mucho esfuerzo se paralizaron, una vez apareció la pandemia que redujo a la población al duro confinamiento que estableció el gobierno entre los meses de marzo y agosto.

Al realizar un recorrido por el Campus Universitario, solo encontramos letreros en las fachadas de estas oficinas que son mudos testigos de los artículos que vendían estos micro negocios.

Estos negocios se permiten con el objetivo de proporcionar a los estudiantes algunos beneficios tales como el no tener que trasladarse fuera del campus a buscar los implementos que necesitan para sus estudios.