Investigaciones de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la UP aporta a la producción nacional de arroz

El decano de la Facultad de Ciencias Agropecuarias de la Universidad de Panamá, ingeniero Eldis Barnes, en entrevista para el Semanario La Universidad denunció que la entidad no está recibiendo apoyo financiero para las investigaciones científicas.

 

Explicó que para ampliar las investigaciones el gobierno central debe proporcionar a la Facultad los recursos económicos necesarios, como lo hacía en los años noventa.

 

Durante estos años, la asignación del gobierno a la Facultad de Ciencias Agropecuarias era de 100 mil dólares anuales. Desde hace dos décadas la investigación se realiza con autogestión, y el apoyo de la administración central, dijo Barnes.

 

Sobre el tema, Carlos Godoy, subdirector de Planificación y Evaluación Universitaria, indicó que el presupuesto que recibe la Universidad del gobierno central se destina, casi en su totalidad, a la parte operativa de la institución.

 

El Decano considera que el gobierno debe prestar atención a la Facultad, y el presidente Laurentino Cortizo lo sabe porque se lo han planteado durante las diferentes reuniones que han sostenido. Agregó que también tiene conocimiento de la calidad de las investigaciones y del trabajo arduo realizado en Ciencias Agropecuarias para que cada proyecto sea un éxito.

 

El 77% de la producción arrocera nacional se realiza con material que ha sido investigado por la Facultad de Ciencias Agropecuarias.

 

Entre las semillas estudiadas está la del Fondo Latinoamericano de Arroz Bajo Riego (FLA), y el grano FCA - 616, que lleva las siglas de la Facultad de Ciencias Agropecuarias. El nombre surge porque es una variación descubierta bajo investigación en Panamá.

 

El catedrático aseguró que pronto debe lanzarse al mercado otra variedad de arroz. Sostuvo que, con el paso del tiempo, los gérmenes, insectos y patógenos que producen las enfermedades, se adaptan y afectan la semilla.

 

El trabajo de investigación para mejorar la semilla es permanente. Hace seis años se lanzó el grano FCA- 616, y la UP-80. La última numeración, corresponde a las siglas de la Universidad de Panamá, puntualizó el decano. Entre las dos variedades de semilla la más resistente es la 616, pero los investigadores se mantienen trabajando en otras para cuando se debilite tener un inventario preparado y lanzarlo al mercado, argumentó el ingeniero.

 

Añadió que obtener una variedad con estas características puede tomar hasta diez años de investigación. El beneficio que brinda un grano mejorado está en el rendimiento crecedor por la libra, y al no ser quebradizo cuando es procesado en los molinos.

 

El profesor fue enfático en señalar que la variedad FCA- 616 tiene una increíble aceptación en el mercado. Sin embargo, llegará el momento en que los insectos encontrarán la forma de dañarla, por ello se debe tener otra semilla en espera.

 

El decano indicó que en estos momentos tienen un material que puede ser lanzado, pero no lo han hecho porque faltan algunos detalles por completar.