Clausura del Veranito Feliz 2025: Más de 190 niños transforman su visión tecnológica en la Ciudad del Saber

Con el propósito de fomentar el aprendizaje de tecnología de la información y comunicación (TIC) en niños y niñas, la Universidad de Panamá, junto con la Facultad de Informática, Electrónica y Comunicación (FIEC) y el Capítulo de Computación del IEEE, clausuraron exitosamente la cuarta edición del «Veranito Feliz 2025» en el auditorio de la Ciudad del Saber en Clayton.

Donna Roper, directora de la Escuela de Gerencia en Comercio Electrónico de la FIEC, y encargada del programa de Veranito Feliz destacó el impacto de esta iniciativa, que ha crecido exponencialmente desde su primera versión en 2022, cuando participaron 60 niños, hasta este año, con 195 inscritos.

“Este proyecto nació como una respuesta a las falencias identificadas en las áreas de matemáticas, español y ciencias en la educación panameña. Nuestro objetivo es que los niños desarrollen pensamiento crítico, análisis y resolución de problemas de manera divertida, utilizando herramientas tecnológicas”, explicó Roper.

El programa incluyó diversos niveles, desde el básico, con introducción a la programación a través de Scratch, hasta el avanzado, donde los niños aprendieron a usar Python mediante bloques de programación.

Además, se trabajaron habilidades en diseño 3D, circuitos electrónicos y metodología de investigación. Una de las metas principales fue que los niños aprendieran de manera lúdica, combinando el uso de herramientas tecnológicas con actividades creativas, como la creación de mundos virtuales relacionados con sus proyectos de investigación.

Más de 45 mentores universitarios, previamente capacitados durante seis semanas, guiaron a los pequeños participantes. Cada grupo contaba con un mentor hombre y una mentora mujer, promoviendo la equidad de género en el ámbito tecnológico. Según Roper, este enfoque busca inspirar a las niñas a considerar la tecnología como una opción profesional en igualdad de condiciones.

El éxito de la iniciativa no solo radica en la cantidad de niños inscritos, sino también en el entusiasmo y transformación que experimentaron los participantes y sus familias. “Los padres están emocionados porque ven cómo sus hijos han cambiado, hablan más, expresan sus ideas con claridad y han perdido el miedo a la tecnología. Esto va más allá de aprender herramientas; estamos formando futuros líderes”, comentó Roper.

A pesar de los retos logísticos y la falta de recursos financieros, el Veranito Feliz ha demostrado ser un proyecto de alto impacto social y educativo. “Esto no sería posible sin el compromiso de los mentores, quienes trabajan como parte de su servicio social. No reciben beneficios económicos, pero han aprendido a conectar con los niños, humanizando aún más su labor profesional”, agregó Roper.

Javier Fernández Pájaro,  decano de la Facultad de Informática, Electrónica y Comunicación de la Universidad de Panamá destacó que la importancia de este evento es el de atraer mucho más estudiantes así la carrera de la tecnología, la información y la comunicación  y su evolución ha sido significativa que después de iniciar con 70 estudiantes vamos casi  ya con 200 estudiantes participando de este evento.

El decano hizo un llamado a los padres a estar atentos al inicio del veranito informático para el año 2026.

La clausura del evento fue un reflejo de los logros alcanzados, marcando un hito en el camino hacia una educación inclusiva y de calidad para los futuros talentos tecnológicos de Panamá.