La UCR aumenta medallero matemático

Con lápices listos y muchas horas de preparación, un equipo estudiantil representó a la Universidad de Costa Rica (UCR) en la XII Competencia Iberoamericana Interuniversitaria de Matemáticas (CIIM 2020) realizada de manera virtual entre los días 20 al 26 de octubre pasados.

De entre los 103 participantes, la UCR se hizo acreedora de cinco medallas de bronce y una mención de honor. La delegación costarricense la integraron Eduardo Salas Jiménez, Alisson Serracín Morales, Gabriel Collado Valverde, Kevin Coto Mora, Jean Carlos Villegas, Andrew Vargas Alfaro y Kevin Rojas.

En esta competencia deben resolver problemas matemáticos de varios temas. El objetivo del encuentro es reconocer a las personas participantes por su creatividad, ingenio e inspiración para resolver los desafíos planteados. Además, se propone formar vínculos personales y académicos que contribuyan a conformar una comunidad científica regional.

Aunque en años anteriores la competencia ha sido presencial, este año debido a las circunstancias sanitarias todo fue mediante la virtualidad. “Consistió de dos pruebas escritas con tres problemas cada una, donde cada pregunta tiene un valor máximo de 10 puntos. Se contó con la participación de instituciones educativas de México, Guatemala, El Salvador, Costa Rica, Colombia, Brasil, Ecuador y Argentina”, detalló el Dr. Juan Gabriel Calvo, docente e investigador del Centro de Investigaciones en Matemática Pura y Aplicada (Cimpa-UCR).

Además de Calvo, la coordinación académica estuvo a cargo de los docentes Dr. Daniel Campos y Dr. Oscar Zamora Luna. Esta iniciativa es un proyecto de Acción Social del Cimpa-UCR denominado “Olimpiadas Universitarias de Matemática” (ED-3493), que tiene como objetivo fomentar el pensamiento lógico-matemático del estudiantado, mediante la resolución de problemas matemáticos, que potencien su desarrollo personal, docente y académico.

Si bien se compite por equipos las pruebas virtuales son individuales y sincronizadas mediante la plataforma de reunión Google Meets. Durante la misma, el jurado calificador podrá monitorear el avance de cada persona mientras se mantenga la cámara encendida. Una vez concluida la tarea asignada los resultados deben subirse a la nube para la posterior evaluación.

Gracias al proyecto ED-3493 en la Competencia Internacional de Matemáticas para estudiantes universitarios, realizada en julio pasado, los estudiantes Kevin Coto, Jean Carlos Villegas obtuvieron medallas de plata y bronce. Además, Gabriel Collado, César Herrera, Kevin Rojas y Johan Guillén recibieron menciones de honor por su desempeño.


Compromiso demostrado

“Siento que estas competencias son una gran experiencia para una como estudiante. Es un reto que se toma, pero es distinto. No es el típico examen que se hace para pasar el curso. No, no es así. Yo estuve ahí por decisión propia, porque quería un reto nuevo. Para el examen de clasificación del equipo recuerdo que yo todavía no estaba decidida en hacerlo y pensé: "voy a intentarlo para entretenerme un rato" y cuando hice lo que pude, sin presión alguna, lo mandé porque no tenía nada que perder”, comentó Alisson Serracín Morales, medallista de bronce iberoamericana y actual estudiante de tercer año de la carrera de Matemática.

Ella recordó que durante el periodo previo a la competencia estuvo muy ocupada con sus otras responsabilidades académicas. “Asistí a los seminarios que ofrece el Equipo de Competencias Matemáticas de la UCR, abiertos a todo público, cabe mencionar. Siento que eso es una buena preparación. En realidad indiferentemente de si se quiere participar en las competencias o no, los y las invito a darse la vuelva a los seminarios, si les gusta la matemática”.

Para el estudiante Jean Carlo Villegas Mora, también acreedor de una medalla de bronce, su vivencia durante el proceso ha sido más que satisfactorio. “Participar en estas competencias me ha enseñado a ser disciplinado, a ser más organizado. Como estudiante de matemáticas me ayudó a fortalecer los conocimientos ya obtenidos en los cursos universitarios y también a profundizar en nuevas áreas que no había estudiado. Además que en estas competencias se da la oportunidad de conocer a otros con los mismos intereses en este campo, que en el futuro pueden ser colegas. También existen institutos que premian a los participantes con becas en el exterior”, añadió.

El estudiante Villegas Mora aseguró que seguirá haciendo su mejor esfuerzo para superar sus resultados y continuar representando a la UCR, a la Escuela de Matemática y a los docentes que le han ayudado en su preparación.

“Quiero incentivar a nuevos estudiantes, no solo de la carrera de matemática, a que se involucren y que participen en estas competencias ya que es una gran experiencia. Quiero decirles que si están interesados pueden acercarse y tanto los profesores como los mismos estudiantes estaremos allí para ayudar”, manifestó Villegas.

Superando la brecha científica

“Yo era la única mujer del equipo de Costa Rica, y estoy casi segura que en total las mujeres que participaron en la competencia las podía contar con una sola mano. Además, en mi carrera casi no se acercan mujeres y el porqué yo lo tengo claro”, criticó la estudiante Alisson Serracín Morales.

“Mucha gente dirá ‘estamos en el siglo XXI, ya hemos avanzado mucho’, pero la verdad es que nos hace falta demasiado. Desde niñas nos repiten que hay ciertas cosas a las que no estamos destinadas. No es casualidad que más de una vez me haya sentido sola en clases porque no hay ninguna chica alrededor. Nos han metido en la cabeza que somos el sexo débil, que esto no es para nosotras, que no podemos. También está el cuestionamiento de la sociedad”.

No obstante, la estudiante es contundente en sus objetivos y pese a los solapados y los evidentes señalamientos sociales que limita la participación de las mujeres en las ciencias continúa hacia su meta.

“Yo les daría el consejo a otras mujeres de que si se sienten interesadas sigan sus sueños. No se limiten y luchen por lo que quieren. Siempre hay personas que se encargan de hacer el trayecto más difícil, pero ustedes solo tápense sus oídos, y sigan adelante. Y a los futuros y actuales padres y madres, les digo que apoyen a sus hijas, incentivarlas a las ciencias. Desde niñas tienen que saber de lo que son capaces. Muchas chicas que tomaron la decisión de irse por una carrera de ciencias básicas han recibido apoyo e influencia de parte de su familia. No tienen que ser genios o académicos para apoyarlas, mi madre sacó bachillerato después que yo y mi padre llegó hasta la escuela, pero sin el apoyo de ellos hubiera sido muy difícil”.

Para Serracín lo que viene a futuro es seguir participando en estas competencias. “Esta fue mi primera vez compitiendo. El reto que tengo es ir el otro año y ojalá sea de forma presencial para vivir la experiencia completa”, concluyó.

El próximo desafío del proyecto ED-3493 es la participación en la XXIII Olimpiada Iberoamericana de Matemática Universitaria, otro encuentro virtual que se realizará el próximo 21 de noviembre.