El joven Sebastián Madrigal Ballestero recién graduado del Bachillerato en Ingeniería Eléctrica destacará a nivel internacional, gracias a su ingenio, esfuerzo y destacada trayectoria como asistente de Laboratorio de Investigación en Ingeniería de Control (CERLab), del Instituto de Investigaciones en Ingeniería (INII), y como estudiante de la Facultad de Ingeniería de la UCR. El brillante ingeniero fue admitido por la Universidad Autónoma de Barcelona para cursar estudios de posgrado y continuar su formación en el área de la Ingeniería de Control.

Madrigal ingresó a la UCR en el 2020 y, en los pasillos de la Escuela de Ingeniería Eléctrica, descubrió su interés por crear modelos matemáticos para automatizar procesos, sistemas y aparatos de la vida diaria, lo cual se conoce como ingeniería de control.

“Realmente, cuando yo entré a la carrera me di cuenta de que una de las áreas que me apasionaba mucho era el modelado matemático. Fui investigando un poco sobre las áreas de la ingeniería eléctrica en las que podía aplicar la parte de modelado matemático, y resultó que el área que me interesaba era de la ingeniería de control”, expresó.

“Esto a mí me ha permitido mezclar la ingeniería eléctrica pura y aplicarla a un montón de áreas que me interesan y que son útiles para el ser humano”, agregó.

Una vez que Madrigal se incorporó al CERLab como asistente de investigación, se inclinó hacia las áreas de control en la generación de potencia para turbinas eólicas y teoría de control fraccional.

Gracias a estos proyectos, presentó varios artículos académicos en el Congreso de Ingeniería de Control PID de Almería en España.

En este congreso, se le brindó la oportunidad de formar parte de un proyecto de investigación denominado SMART-LEM, financiado por la Unión Europea, el cual trabaja en el impulso y desarrollo de los mercados eléctricos para acelerar la transición hacia energías limpias.

Madrigal desarrollará ese proyecto en paralelo a sus estudios de posgrado en la Universidad Autónoma de Barcelona.

El estudiante agradeció a sus docentes de la Escuela de Ingeniería Eléctrica y a la Universidad de Costa Rica por el apoyo durante su proceso de formación integral.

“En el desarrollo de mis habilidades de investigación, académicas e, incluso, profesionales, la Universidad de Costa Rica para mí significa todo”.

“En la Escuela de Ingeniería Eléctrica y en la Facultad de Ingeniería, uno como estudiante está rodeado de profesores que no solo son docentes, sino también investigadores y  académicos reconocidos a nivel mundial. Eso fue transcendental, porque yo creo que aunque uno sea muy bueno y sea académicamente destacado, si a uno no lo perfilan y no lo van encaminando hacia una ruta específica, pues uno no va a poder despertar ni potenciar esas capacidades”.

“En mi caso, tuve unos profesores excelentes, como Orlando Arrieta y José David Rojas. También tuve la dicha de ser asistente de un laboratorio de investigación. Entonces, fue gracias a la UCR que pude acceder a este tipo de oportunidades”.

El joven le agradeció a la UCR por la oportunidad de contar con una beca socioeconómica, que le permitió culminar con éxito sus estudios. Él espera poder devolverle al país su inversión en educación, ya que se considera fruto del sistema nacional de educación pública.

“Yo, sinceramente, les digo a otros estudiantes que es posible, que perfectamente pueden tener éxito. En mi caso, yo vengo de un colegio público, soy foráneo, soy de Turrialba. Fue una transición, son etapas de la vida que uno tiene que afrontar”.

“La Universidad de Costa Rica a uno lo apoya, uno puede sentir el apoyo de los profesores e, inclusive, del programa de becas. Se puede perfectamente salir adelante y destacar. Para mí, el sistema de becas de la UCR es un motor de impulso para estudiantes que de otra forma no tendrían acceso a la educación superior. Yo espero que en los siguientes años se fortalezca para que más estudiantes sean beneficiados”, manifestó.

Este joven turrialbeño partió rumbo a España el sábado 12 de octubre.