El impacto derivado de la emergencia sanitaria por el COVID-19 en la situación económica del país es indudable, pero incluso en este contexto, la ciudadanía reconoce la importancia de que Costa Rica continúe invirtiendo en infraestructura, salud y educación.
Así lo reveló un estudio presentado por el Consejo Nacional de Rectores (Conare). El material fue elaborado por Investigaciones Psicosociales S. A., empresa con 34 años de experiencia en el análisis de actitudes, conocimientos y comportamientos de la población en el país.
El presidente del Conare, Luis Paulino Méndez, destacó la importancia de estudiar y análizar de manera permanente de la realidad nacional, como base para la toma de decisions frente al complejo contexto sanitario y económico que experienta el país.
“Es fundamental tener la claridad, el análisis coyuntural, sin perder de vista la Costa Rica que queremos para definir un camino que responda a los retos inmediatos y al futuro que asegure el bienestar de la población”, afirmó Méndez.
La medición se aplicó entre el 11 y 23 de julio anteriores, por medio de llamadas telefónicas a números celulares, y consultó sobre diversos temas coyunturales a una muestra de 1 204 personas distribuidas en diferentes localidades del país.
Según la encuesta, el 79,1 % de las personas consultadas reconoció una disminución en los ingresos familiares como resultado de la actual pandemia. En el 42,3 % de los casos, tal afectación representó más de la mitad de los recursos que percibían y en el 17,1 % significó la totalidad.
En el 56 % de los casos consultados se retrató la pérdida de empleo por parte de la persona entrevistada o de algún miembro de su familia, y el 69,7 % de la muestra valoró de manera negativa la situación económica del país, frente a solo un 4,3 % que la calificó de forma positiva.
Pese a la difícil realidad descrita, la ciudadanía apoyó con contundencia que el país siga fortaleciendo el modelo de desarrollo social que ha impulsado hasta ahora. El 73,7 % de los entrevistados respaldó un aumento de la inversión en salud pública y el 22,8 % apoyó que el rubro actual en esta materia se mantenga.
El 43,5 % de las personas consultadas respaldó el fortalecimiento de la inversión del país en infraestructura mediante la creación de obras públicas, como puentes y carreteras, mientras que el 34,8 % consideró que esta apuesta económica continúe como hasta ahora.
Por otra parte, se evidenció un incuestionable apoyo social a la educación pública en el país. El 92,9 % de las personas consultadas respaldó la inversión estatal en educación pública primaria y secundaria, mientras que el 90,5 % apoya la inversión en la educación superior pública.
Según el psicólogo e investigador de la empresa Investigaciones Psicosociales S. A., Marco Vinicio Fournier, la valoración positiva de las medidas sanitarias y el papel del Ministerio de Salud y de la Caja Costarricenses de Seguro Social (CCSS), en la atención de la emergencia, han generado en la ciudadanía una revalorización del papel de la institucionalidad pública.
“Pareciera que el impacto de la pandemia ha hecho que las personas vuelvan a valorar la importancia de contar con un Estado sólido e instituciones fortalecidas para enfrentar eventuales situaciones de crisis”, explicó el académico.
Ciudadanía reconoce papel de las universidades públicas
La encuesta retrató una valoración positiva del quehacer de las universidades estatales. Estas instituciones recibieron una calificación general de 8,59 por parte de la ciudadanía, la cual en el caso de la Universidad de Costa Rica (UCR) alcanzó el 8,98.
La población consultada atribuyó una valoración de 8,25 al trabajo y aportes que realizan las universidades públicas en las diversas comunidades de todo el territorio nacional, en tanto la UCR obtuvo un 8,62.
La muestra consultada otorgó un 9,05 a la calidad de la educación que brinda la UCR, cuya presencia en la atención de la actual emergencia sanitaria fue catalogada como “muy importante” por 55,7 % de las personas entrevistadas y como “algo importante” por 17,4 %.
Pese a la valoración positiva que se atribuyó al quehacer de las universidades públicas, la consulta permitió constatar que el 62 % de las personas encuestadas desconoce la fuente de financiamiento que hace posible su trabajo y solo un 32,5 % lo reconoce como inversión del Estado.
El rector de la UCR, Carlos Araya Leandro, enfatizó que desde hace 80 años la Institución mantiene el compromiso de aportar a la construcción del país desde las diversas áreas del conocimiento, tanto en contextos cotidianos como en situaciones excepcionales, por ejemplo, la que plantea la coyuntura actual.
"Estos datos los recibimos como un mensaje claro de la población costarricense hacia el trabajo que desempeñamos como universidad pública, recibimos su respaldo y también sus exigencias", enfatizó el jerarca universitario.
Aportes de las universidades públicas al desarrollo
El 82,7 % de la ciudadanía que participó en la consulta manifestó estar de acuerdo con que las universidades estatales fortalezcan el desarrollo de sus sedes regionales alrededor del país y el 84,4 % consideró que deben invertir en más aportes a las comunidades.
La perspectiva anterior podría relacionarse con el 47,9 % que expresó algún nivel de desacuerdo con la posibilidad de que estas instituciones públicas dediquen la mayor parte de su trabajo a la enseñanza y atiendan en menor medida las áreas de investigación, extensión y acción social.
Por último, el 75,1 % de los encuestados consideró que el Estado debe cubrir la mayoría del presupuesto que hace posible el trabajo de las universidades públicas, frente a un 15,7 % de la muestra que manifestó su desacuerdo al respecto.
Según Fournier, los resultados obtenidos en esta oportunidad sobre el posicionamiento de las universidades estatales son consistentes con estudios previos que han colocado a estas instituciones en los primeros lugares de valoración ciudadana.
“No se registra un cambio de la población en este tema, las universidades públicas manejan una percepción positiva desde que se iniciaron las mediciones de la imagen institucional en la década de los noventa y esto solamente se ha venido reforzando”, concluyó el experto.
El desarrollo de esta encuesta fue financiado por la UCR. El tamaño muestral y la técnica de selección de las personas consultadas atribuyen un 95 % de confianza respecto a los resultados generados.
El cruce de las respuestas al cuestionario con las variables sociodemográficas de las personas entrevistadas evidencia una alta homogeneidad en las opiniones y actitudes de la gente que se encuestó, puesto que existen pocas diferencias significativas respecto a sexo, edad, región, religión y condición de actividad.
El tamaño muestral y la técnica de selección de las personas consultadas atribuyen un 95 % de confianza respecto a los resultados generados. Esta encuesta es iniciativa de la UCR y la muestra estuvo conformada por 47,6 % de hombres y 52,2 % de mujeres.
Sobre la empresa que desarrolló la encuesta: Investigaciones Psicosociales S. A.
Ámbito de acción: Durante 34 años, la compañía ha desarrollado investigación social en diversos campos de la política, la salud y los derechos humanos, con énfasis en el análisis de actitudes, conocimientos y comportamientos de la población general o de subpoblaciones especiales en toda la región centroamericana.
Enfoque metodológico: Los estudios de Investigaciones Psicosociales S. A. se desarrollan tanto en el ámbito cuantitativo como cualitativo. Se busca siempre un balance y una complementariedad entre la profundidad en el análisis y la sistematización y generalización de resultados.
Procedimientos científicos: La amplia experiencia acumulada por la empresa ha permitido implementar y actualizar constantemente mecanismos rigurosos para recolectar datos con estrategias de selección y muestreo que maximizan la aleatoriedad y la precisión. Asimismo, ha posibilitado el uso de las últimas aplicaciones de georreferenciación, módulos especiales para supervisar el trabajo de campo, las más modernas técnicas de registro de la información mediante dispositivos móviles, programas computacionales propios para la crítica y limpieza de las bases de datos y los análisis estadísticos más precisos.
Instrumentos de recolección: Nuestras técnicas de recolección de información combinan formatos estructurados y semiestructurados con técnicas psicométricas, para generar escalas de medición más confiables y válidas, las cuales permitan medir variables así como procesos psicosociales que difícilmente se podrían registrar mediante preguntas tradicionales.
Técnicas de análisis: Los análisis estadísticos van mucho más allá de la simple descripción de distribuciones de respuestas. Mediante diversos análisis multivariados, la información es procesada para implementar indicadores, perfiles, conglomerados y estructuras factoriales exploratorias, lo cual permite un análisis y una interpretación más profunda de las actitudes y los comportamientos sociales.
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