Entrevista de la Rectora a programa universitario de Honduras

Este miércoles, 24 de junio, la maestra Ramona Rodríguez Pérez, Rectora de la UNAN-Managua y Presidenta del Consejo Nacional de Universidades (CNU), participó de manera virtual en una entrevista para el programa Café Presencia, de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras (UNAH), cuyo espacio permite abordar diferentes temáticas del ámbito académico.

Durante la entrevista la Rectora dio a conocer la historia, oferta educativa de grado, posgrado y programas especiales de la Universidad, la cual atiende a 37,226 estudiantes, siendo el 60% mujeres. Estos son atendidos por 9 facultades y el Instituto Politécnico de la Salud (POLISAL), así como por los centros de investigación, institutos y laboratorios especializados que refuerzan sus conocimientos científicos y, a la vez, fortalecen las relaciones con el Estado y la sociedad.

De igual manera, habló de los tres programas insignes que tiene la Institución: Universidad en el Campo (UNICAM), en el cual se atiende a estudiantes desde 15 hasta los 68 años de edad, que habitan en las zonas rurales del país y que por múltiples razones no pueden trasladarse a los recintos universitarios, sin embargo, el desarrollo de competencias es fundamental para que no migren a la ciudad, sino que aporten a la transformación de su entorno y mejoren su nivel de vida; Universidad para la Paz, este es importante para los nicaragüenses porque promueve espacios de formación integral en temas de derechos humanos, entre ellos, igualdad de género, relación generacional e intergeneracional, amor a la madre tierra, cultura e interculturalidad, y Universidad Saludable que promueve la práctica de acciones saludables tanto para el ser humano como para el medioambiente. «Si hay armonía, hay convivencia, hay paz, hay desarrollo», destacó la maestra Rodríguez.

Respecto al rol de la Universidad frente al covid-19, la Rectora destacó que, desde antes de reportarse el primer caso positivo en Nicaragua, la Universidad como una Institución responsable y a fin de garantizar el bienestar de la comunidad, ya tenía preparado su protocolo de actuación el cual fue aprobad por el Consejo Universitario. Como parte de este (plan de acción), se capacitó a 2,000 trabajadores sobre las recomendaciones sanitarias emitidas por el Ministerio de Salud (MINSA), se implementó el uso de termómetros digitales infrarrojos para tomar la temperatura, mascarillas quirúrgicas, protectores faciales, guantes y atomizadores con alcohol, asimismo, se ubicaron dispensadores con jabón en las zonas da acceso y baños.

En cuanto a las clases, la maestra Rodríguez explicó que se crearon condiciones para evitar aglomeración (en los recintos)y la actividad académica se ha desarrollado por encuentro, sin embargo, «hay estudiantes que han decidido quedarse en casa y la Universidad ha sido flexible con el propósito de que no haya abandono estudiantil»; por lo tanto, se han buscado estrategias didácticas que den respuesta a dicha necesidad. Destacó que el trabajo que ya se había realizado para la virtualización de algunos programas fue un avance significativo que permitió poner a la disposición el campus virtual y otras herramientas digitales para complementar el proceso de formación.

La académica reafirmó que ante la realidad que se vive, la Universidad tiene que asumir retos y activar una nueva modalidad aprovechando las habilidades que los jóvenes tienen con las tecnologías. Hasta la fecha y para el segundo semestre se ha pensado en continuar trabajando por encuentro con grupos pequeños de clase que permitan el distanciamiento recomendado y se mantienen las campañas de información, prevención y concientización dirigida a la comunidad estudiantil, ya que por ser jóvenes se confían, pero también pueden ser afectados por el coronavirus.

La máxima autoridad de esta casa de estudio informó que desde la Universidad se realizan investigaciones para contribuir al manejo de la pandemia y que los estudiantes se han implicado en el levantamiento de información sobre personas con enfermedades crónicas, así como en la creación de la base de datos que contenga este registro. Finalmente instó a diseñar programas más flexibles que propicien el desarrollo de competencias tomando en cuenta a los estudiantes para la construcción de los perfiles.